Cuando Xurxo me llamó... las espectativas de un día gris se llenaron de luz; mejor estar al aire libre en buena compañía que limitado por cuatro paredes... A pesar de saber, más bien de prometerme a mí mismo, que no iba a forzar mi brazo derecho... demasiado tiempo jugando en el filo de la navaja, entre el dolor punzante y la sobrecarga... jugando a la cal y a la arena.
Para ser honrado, tras recomendarle reiteradamente al Doctor Sputnik el reposo y el cuidado como medio terapeútico, decidí aplicármelo yo mismo... unos días de descanso, kinesio y estiramientos seguro que me ayudan a recuperar el buen estado. Hay un dicho que se usa mucho: "eres más bruto que un arado"y mi madre siempre me dijo que soy un "brutiño"...
El día se presentó seco, a pesar de las predicciones y el plan no podía adecuarse más a mi planteamiento de "resting day", aunque he de confesar que posteriormente tuve mis "tentaciones"... Un par de proyectos pendientes para Xurxo, y aire fresco para mí... Jugar un poco con la cámara llegado el momento, pero sobre todo, sentir el aire...
Muchas posibilidades en la sierra...
Subidos casi en lo alto de la sierra, donde le viento sopla... A la zona de "A jateira" en Muimenta. Dónde esperaba el "Cocotero", un filo horizontal que sale por una proa... El camino seguía cortado por un árbol caído, así que con los crashpads a los hombros hicimos el calentamiento hasta el bloque... Las nubes altas, muy altas pero un aire fresco muy fresco.. .parecían condiciones ideales para asaltar el proyecto. Llegar, adecuar el pie de bloque y consensuar un poco la toma a rodar... Y a darle duro... Por un momento la tentación se presentó ante mí... pero la eludí cogiendo la cámara, pues el bloque no presentaba una caída arriesgada... no más de lo habitual...
A veces animar es fácil, otras lo difícil es refrenar o aconsejar cuando sólo con presenciar los movimientos tu pulso también se acelera... Pero las sensaciones eran buenas, a pesar de que la compresión y el roce estaban acabando con el pantalón de Xurxo. Hasta que llegó el pegue, y todo se volvió luz... Un proyecto menos o uno más... Un buen encadene, una alegría para llenar un día más de buenas sensaciones...
Xurxo Brea en el "crux", pero ahí no acaba todo...
La vivencia de la escalada no se resume en un mero ejercicio físico, ni en la simple consecución de una meta, de ahí la complejidad que siempre supone graduar... o encadenar... Comprender, sentir, vivir y sobre todo disfrutar... Con tu cuerpo y tu mente como campo de juego, con el mundo como escenario, con las rocas como medio...
Luego con una barrita como alimento nos acercamos hasta el sector Trebello para ultimar y si era posible finiquitar el otro proyecto del día... "la Cuchara" de sentado... Y como es la motivación y como es la bioquímica del cuerpo; al primer intento Xurxo voló con sus dos manos hasta el canto de salida... Los siguientes pegues fueron "para las maracas"... Pero asegurando y matizando la secuencia para que el próximo día un bloque menos o uno más pasen a engrosar la lista...
A la sombra de "La Cuchara" a punto de volar...
Y ahí estaremos, intentándolo, por que de eso se trata, de intentar que cada momento sea mejor, y nos haga más felices y disfrutemos del radón...
Muchas gracias a Vir por aceptar la mentira de "Vamos un ratito y ahora volvemos" y un fuerte abrazo al Doctor Sputnik... Para que cuando se venga a la Pena, nos riamos juntos apretando como locos...
Vuelta a la Normalidad
Hace 5 días
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